Ante los temores y las posibles repercusiones de implementar la nueva generación 5G de telecomunicaciones, en cuanto a contaminación por CEM, te contamos cómo solucionarlo
El 5G llegó para quedarse y cambiar por completo la forma en la que nos comunicamos: multiplicará la capacidad de nuestras autopistas de la información y permitirá que los objetos cotidianos se conecten (con nosotros y entre ellos) en tiempo real. El despliegue de esta nueva generación de telecomunicaciones representa una revolución tecnológica total, que nos permitiría lograr avances sin precedentes en todos los campos.
Ahora bien, existe cierta preocupación y cierta resistencia pública a la plena implementación de esta tecnología, ya que la frecuencia para la que fue concebida originalmente (ondas milimétricas o por encima de 30 GHz) es muy alta y puede generar una importante contaminación electromagnética o electrosmog que podría afectar tanto el medio ambiente como la salud.
5G actual y lo que viene después
Esta quinta generación de tecnologías ya se ha implementado en una primera fase en países como Estados Unidos, Corea del Sur, China, España, Alemania, Suiza, entre otros. En esta fase, opera en la misma ventana que 4G y WiFi, que es la banda Sub 6 (por debajo de 6 GHz); sin embargo, funciona a una frecuencia ligeramente superior a la 4G. Eso quiere decir, que el 5G que está funcionando actualmente tiene una frecuencia muy similar a la del 4G e incluso, es inferior a la del WiFi de 5 GHz.
Ahora bien, como comentábamos anteriormente, se habla de que el 5G en su segunda fase podría llegar a operar en ondas milimétricas, y es por ello que su implementación ha generado tanta preocupación en la opinión pública; ya que es un hecho que estas ondas llevan una mayor potencia en su propagación y, de hecho, pueden causar daños biológicos.
Contrarrestando los efectos del 5G con la tecnología SPIRO®
La tecnología SPIRO® funciona en todo el espectro de frecuencias electromagnéticas. Por ejemplo, el material SPIRO® se puede escalar para cualquier nivel de intensidad de radiación, incluidos los niveles industriales y militares.
La razón de esto es, que trabajamos con nanomagnetismo aplicado. En otras palabras, usamos atributos de ciertas nanopartículas que exhiben un comportamiento de dominancia magnética natural a nanoescala; por lo que son compatibles con todas las partículas subatómicas que se propagan en una onda electromagnética artificial y portan el desequilibrio que genera la contaminación electromagnética.
Para que se entienda mejor, al transferir información a través de las telecomunicaciones, las tecnologías generan una polarización artificial y crean un desequilibrio en la carga eléctrica de las partículas. Es aquí cuando SPIRO®, mediante el uso de nanomagnetismo aplicado, es capaz de operar como un filtro pasivo que no afecta la trayectoria de las ondas, sino que equilibra las cargas y la desorientación magnética que llevan esas partículas.
Protección, incluso en los niveles de intensidad más altos
Al trabajar con intensidades de dominancia magnética, SPIRO® reacciona a cualquier nivel de frecuencias en el espectro. Obviamente, cuanto más intensa sea la ola, mayor será el nivel de dominancia que se necesitará para generar el reordenamiento que buscamos. Es por eso que, para cumplir con niveles más altos de intensidad de onda, aumentamos el uso del material SPIRO®, según el caso que estemos tratando.
Por ejemplo, para manejar los niveles de emisión típicos de los dispositivos personales, solo necesitará tres filminas SPIRO® protegidas en una tarjeta de PVC del mismo tamaño que una tarjeta de crédito (SPIRO CARD®). Eso es suficiente para manejar la intensidad estándar de los nuevos teléfonos 5G – quinta generación.
Por otro lado, cuando se trata de emisiones mucho más altas o de nivel industrial, esta tecnología debe ampliarse. La forma en que esto se hace es, agregando más filminas SPIRO®, lo que permite dominar intensidades de onda mucho más altas a niveles nanomagnéticos. Esto se conoce como orden magnético natural.
Durante 2 años, hemos monitoreado incansablemente el desarrollo de la tecnología 5G y hemos trabajado en una formulación para encontrar la cantidad específica de películas SPIRO®, necesarias para manejar las exposiciones electromagnéticas 5G en su frecuencia más alta. Hoy podemos anunciar que hemos conseguido concretar la cantidad exacta para poder controlar este tipo de contaminación generada por las ondas milimétricas.
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